¿Por qué nos enamoramos online?

Hay quienes afirman que es imposible enamorarse de una persona que jamás hemos visto. Dicen que para amar a alguien es necesario mirarle a los ojos, verse cara a cara. En realidad, estas personas están hablando del amor maduro, ese que se construye con el paso del tiempo y la convivencia. 

Sin embargo, existe otro amor, más joven e impetuoso, que puede surgir incluso si no conocemos físicamente a la persona. Me estoy refiriendo a las personas que se enamoran online, un fenómeno cada vez más común en nuestra época, cuando Internet ha derruido las barreras geográficas.

Ante todo, quiero puntualizar que estoy convencida de que las parejas que se conocen online y mantienen un contacto más o menos constante a través de Internet, pueden funcionar. Conozco varios casos que no solo han llegado al matrimonio sino que incluso ya llevan años de convivencia feliz.


¿Cómo es posible que dos personas se enamoren online?

En primer lugar, es necesario desechar el mito de que los encuentros online muestran a una persona construida, ficticia, inventada a propósito para seducir. En muchos casos, sobre todo cuando las personas son tímidas, logran mostrar la mejor parte de su “yo” a través de la pantalla del ordenador porque son capaces de romper el hielo, ser simpáticos, amables, detallistas y mil características más que quizás en un encuentro cara a cara jamás saldrían a relucir. Por tanto, en las citas online muchas personas logran mostrar su faceta más interesante y eso es motivo más que suficiente para seducir a otro.

En segundo lugar, en los encuentros online suelen haber muchos vacíos de información. Como no logramos decodificar toda la información extraverbal que normalmente tenemos a nuestra disposición en un encuentro cara a cara, se crea un vacío y en este punto entra en juego el mecanismo proyectivo de nuestra mente. Es decir, cuando existen vacíos de información tendemos a llenarlos con los datos que ya hemos recopilado a partir de nuestra experiencia.

Lo curioso es que si tenemos unas expectativas positivas sobre la relación y la persona, nuestra tendencia será a proyectar características de nosotros mismos en esa persona. En palabras sencillas: te sientes solo y buscas una pareja, no conoces muy bien a la persona con la cual conversas pero te resulta simpática, entonces llenas los vacíos de información con características que te agradan, de manera que satisfaces tus expectativas. De esta forma, la relación continúa y sientes que la otra persona y tú tenéis más puntos en común, lo cual, efectivamente, os acerca aún más. Como resultado: te enamoras.

Obviamente, más tarde, con el trato continuo, podrás descubrir si las características que has proyectado realmente están presentes en la otra persona o no. En este punto, es importante puntualizar que si bien el mecanismo de proyección es algo perfectamente normal, es vital que nos mantengamos atentos porque puede crear expectativas demasiado elevadas, ilusiones que después no se cumplirán y nos harán desilusionarnos.

Consejo sano: cuando encuentres a una persona online y entre vosotros surja la chispa del amor, no tengas miedo en seguir adelante pero intenta llenar esos vacíos de información con datos reales. Cuando quieras saber algo, simplemente pregúntalo. Recuerda que la proyección es un arma de doble filo.
http://www.rinconpsicologia.com/2013/12/por-que-nos-enamoramos-online.html
http://www.adoos.com.uy/post/17041332/psicologo

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