¿Por qué cuesta tanto bajar el colesterol?
EROSKI CONSUMER JUEVES, 20 DE MARZO DE 2014 Boca y lengua pastosa, digestiones difíciles y pesadas, náuseas, alteración del ritmo intestinal con tendencia al estreñimiento, mal aliento,... Son algunos síntomas comunes en personas que tienen dislipemias, es decir, sus niveles de lípidos plasmáticos alterados. La causa, en muchos casos, está en una disfunción hepática, y es por ahí por donde conviene comenzar a tratar el problema. La consecuencia es la elevación del colesterol, de los triglicéridos o de las enzimas hepáticas. El abordaje dietético y nutricional en caso de dislipemia requiere un enfoque integral. A continuación se detallan las deficiencias en el tratamiento dietético que impiden una correcta resolución del problema, qué errores alimentarios se comenten, qué alimentos no ayudan y cuáles son los más indicados para actuar sobre la causa. Vencer al colesterol: actuar sobre la causa, no sobre la consecuencia El hígado es el principal órgano encargado de gesti