LA ATENCION ES EL PODER DE LA CONCIENCIA

En general, nuestra Conciencia es el escenario del mundo interior, pero en lugar de ser el Teatro de la Vida, es apenas un teatro oscuro y abandonado, librado a la anarquía de actores y espectadores, sin que sepamos muy bien cuál es la Obra que estamos desempeñando. Nos falta orden, luminosidad y, fundamentalmente, un buen Director.
Recordemos que en la antigüedad el teatro iba mucho mas allá de un simple esparcimiento y que, en cambio, tenía como objetivo la CATARSIS, una PURIFICACION a través de las actuaciones, tan imprescindible tanto para actores como para espectadores en intima comunicación. Y no olvidemos otro par de elementos esenciales; el valor de la OBRA, es decir, el AUTOR, y el papel definitivo del DIRECTOR.
Si queremos devolver el sentido a la Conciencia, hace falta dotarla de uno de sus principales poderes: la ATENCION. La Conciencia en si misma está plena de posibilidades, pero para hacer de esas posibilidades hechos útiles y objetivos, hace falta entrar en la Conciencia con la luz de la Atención.
La Conciencia es el Teatro. La Voluntad es el Director de la Obra que se vive en el teatro. La Atención es el conocimiento de la OBRA.
Y nosotros somos al mismo tiempo actores y espectadores. Actores regulares y malos, aunque con pretensiones de genios, que sólo atinamos a dejarnos arrastrar por los “argumentos” que nos presenta la existencia, sin saber hacia dónde nos conducirán.
Desconocemos al gran Autor y el gran Drama de la Vida, con su principio, sus pruebas y experiencias, y su desenlace final. Y como espectadores, nos confundimos con los actores, invadimos el escenario en mezcla desordenada, aplaudiendo en todo caso los errores de los que actúan, puesto que son nuestros propios errores. Así como es natural, no hay evolución ni tampoco la purificación de la catarsis.
Es hora de reconocer al AUTOR y poner en escena su verdadera OBRA, la que representa el andar de la Humanidad por su senda de crecimiento y el desarrollo individual de cada uno de nosotros, con su propia carga de karma.
Es hora de dejar paso al DIRECTOR, lo que equivale a poner en marcha el gran poder de la conciencia.

GENTILEZA: LIC. GONZALO COSENZA (PSICOLOGO)
goncos@netgate.com.uy

REFEXION:

“El destino es la ruta que señala la ley de Evolución. Ésta es una ruta ascendente de esfuerzo donde cada paso supone una superación”. (Juegos de Maya)






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